Conservas caseras de tomate: sabores de temporada

La temporada de tomates frescos es perfecta para preparar conservas caseras de tomate. Con ingredientes naturales y los envases adecuados puedes convertir tomate frito, pisto, gazpacho, salmorejo y mermelada de tomate en auténticas delicias para disfrutar todo el año.

Tomate frito y pisto en tarros de vidrio

El tomate frito y el pisto son clásicos de la cocina casera. Para conservarlos en temporada, los tarros de vidrio para tomate son ideales: permiten ver el contenido y mantienen bien el calor al cerrarlos. Sigue estos pasos sencillos:

• Lava bien los tarros y las tapas con agua caliente y jabón, y sécalos. Hiérvelos o mételos en el lavavajillas a alta temperatura para esterilizarlos.
• Rellena los tarros con la salsa aún caliente, y golpéalos suavemente contra la encimera para sacar las burbujas de aire.
• Deja unos 2 cm libres en la parte superior de cada tarro. Limpia bien los bordes y cierra las tapas de forma firme.
• Pon los tarros boca abajo unos minutos o cuécelos en agua hirviendo 15-20 minutos (baño maría) para crear el vacío.
• Deja enfriar boca abajo; cuando las tapas se hundan, significará que se sellaron bien. Etiquétalos con la fecha y guárdalos en lugar fresco y oscuro.

Mermelada de tomate: un toque dulce de verano

La mermelada de tomate es una forma dulce de aprovechar los frutos del verano. Añade azúcar y cocina los tomates a fuego lento hasta obtener una confitura deliciosa. Para envasarla:

• Rellena tarros de vidrio limpios y esterilizados con la mermelada muy caliente, dejando un pequeño hueco arriba.
• Cierra cada tarro y hazles un baño maría como con el tomate frito. Al enfriarlos, comprueba que las tapas queden hundidas; así la mermelada se conservará en perfecto estado.
• Guarda los tarros en la despensa o nevera, en un lugar fresco y oscuro. Así podrás disfrutar de este toque dulce durante varios meses.

Gazpacho en botellas PET para llevar

El gazpacho es una sopa fría refrescante. La mejor idea es envasarlo en botellas PET para gazpacho: son envases ligeros y seguros, perfectos para llevarlo donde quieras. Para conservar tu gazpacho casero:

• Licúa tomate, pimiento, pepino, ajo, aceite y vinagre. Cuélalo para lograr una textura fina.
• Deja enfriar un poco y llena botellas PET limpias con el gazpacho, dejando un poco de aire arriba.
• Cierra bien las botellas y refrigera. Dura 3-5 días en la nevera.
• Congela algunas porciones para tener gazpacho listo todo el verano sin perder frescura.

Envasado de salmorejo casero: tradición andaluza

El salmorejo es una crema de tomate con pan y aceite típica de Córdoba. Para conservarlo bien:

• Muele tomate, pan, aceite y ajo en la batidora hasta obtener un salmorejo suave y cremoso.
• Vierte el salmorejo tibio en envases limpios (tarros de vidrio o botellas PET), dejando un espacio en la parte superior. Opcional: añade un chorrito de aceite sobre la superficie antes de cerrar para protegerlo.
• Cierra bien y refrigera inmediatamente; dura 2-3 días en la nevera. Para más tiempo, congélalo en porciones.
• Revisa el color y el aroma antes de servir: debe oler fresco y mantener su color vivo.

Con estos consejos, tus conservas caseras de tomate estarán listas para cualquier ocasión. Recuerda usar siempre envases adecuados: tarros de vidrio para salsas de tomate o botellas PET para gazpacho y salmorejo.

En Vidripack tenemos tarros de vidrio y botellas PET de varios tamaños, ideales para tus recetas caseras. ¡Descúbrelos y conserva siempre el sabor de tu huerto!